CARTAS A MI MUJER SESENTA Y CUATRO
MIÉRCOLES, 22 ENERO 1999, MADRID Segunda parte Siento estar tensando una cuerda que no existe. Qué barbaridad. Qué sueño. Ya estoy del otro lado mi amor, nada en mí es bendición, sin embargo, ella insiste en seguir teniendo esperanzas conmigo. Y yo, ya estoy perdido. No sé dónde volver. Las bombas sobre una ciudad indefensa, las bombas sobre las mujeres en el hogar, las bombas sobre los niños jugando distraídos, las bombas, mi amor, han desviado para siempre mi camino. No sé dónde volver, porque las bombas rompieron mi memoria.